martes, 1 de mayo de 2012

sábado, 17 de marzo de 2012

Joy

Siempre me fue difícil escribir cuando estoy feliz. Soy de esas personas que tiene imaginación y mejor vocabulario cuando está melancolica o miserable. Nunca pude expresar como quise la dicha, mientras que la tristeza fue escrita de todas las maneras que el lenguaje me permitió.
La felicidad que me invade últimamente es tan difícil de poner en palabras que simplemente sonrío todo el tiempo, y ya me hicieron notar muchas veces que estoy muy sonriente todo el tiempo, especialmente con los ojos.
Así que pido disculpas si mis entradas se vuelven más aburridas o secas, es que me tienen que mirar para entender...
Soy muy feliz!

lunes, 5 de marzo de 2012

Everything

Después de tanto tiempo, podría escribir sobre muchas cosas,

Como la felicidad de despertarme cada día
o la sonrisa que me acompaña cada amanecer, al irme a dormir.

Podría describir esa necesidad inmediata de estar todo el tiempo con vos, 
de repetir besos, de nunca soltarte la mano.

De conocerte, y sentir como nuestras almas se unen cada día, 
cuando me contás tu pasado, tus sueños y tus miedos.

Escribiría sobre la paz que siento porque nunca estuve tan segura 
que todo está en un plan divino que nos asegura que todo va a estar bien.
De esa confianza de confiar puramente.

Podría escribir del miedo que siento, igualmente, de perder todo en un parpadeo, 
porque mi maldita experiencia no me deja ver el Sol por más de un segundo.
Sigo temiendo que se derrumbe todo al momento en que aparte la mirada.

Pero, principalmente, podría escribir sobre el agradecimiento que tengo
Por haber conocido gente maravillosa
Por haberme replanteado cosas
Por dar segundas oportunidades
Por perdonar y perdonarme

Por esa silla que quedó vacía para que se siente Él.

Podría escribir mil textos esta noche

jueves, 9 de febrero de 2012

-2

Me golpeo la cabeza, me tiro de los pelos, me muerdo los labios, grito y lloro y me río histéricamente porque quiero dejar de pensar quiero dejar de pensar basta de pensaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaar!!!!
Mi cabeza está cultivando ideas que mueren cuando duermo, y durante el día germinan de nuevo. Estoy dando vuelta en círculos, mi cabeza necesita un descanso cada una hora porque no da más, está exhausta; mi cuerpo tiene arranques de sueño y energía, porque no puede controlar la agitación, los nervios y la ansiedad de querer que el tiempo pase más rápido de lo que debería.
El estado zen que tuve el 2011 se me fue a la reberenda mierda, mi cuerpo y mente se divorciaron y cada uno va a ritmos diferentes, uno corre, grita y salta al compás de canciones de blues, mientras el otro está hace diez días en una esquina inmóvil pensando. Sólo pensando, y pobre no da más. Está dividida entre la esperanza y el miedo, el ilusionarse o pegarse un tiro ahí mismo. 
Y yo, Satine, escribo, para aliviar a los dos, mente y cuerpo. 

miércoles, 8 de febrero de 2012

Miedo

La palabra miedo proviene del término latino metus. Se trata de una perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario.
El miedo es una emoción que se caracteriza por un intenso sentimiento habitualmente desagradable, provocado por la percepción de un peligro, ya sea presente o futuro, real o supuesto.
Según el enfoque de la biología, el miedo es un esquema adaptativo y supone un mecanismo de supervivencia y de defensa que permite al individuo responder ante situaciones adversas con rapidez y eficacia.
Desde el punto de vista de la psicología, el miedo un estado afectivo y emocional, necesario para la adaptación del organismo al medio.
 Según mi amigo René, "... el miedo o el terror, que es contrario a la intrepidez, no es sólo una frialdad, sino también una turbación y un pasmo del alma que le quita la fuerza de resistir a los males que cree próximos".

Perdón, pero ninguna definición me ayuda a lo que estoy sintiendo en este momento.